Este blog rinde honor y alabanza al Dios de nuestra salvación a Jesucristo el Señor.

martes, 5 de enero de 2016

¿Somos de bendición o de tropiezo?

Piedras de tropiezo

Lucas 17:1-4 Dijo Jesús a sus discípulos: Imposible es que no vengan tropiezos; mas !ay de aquel por quien vienen Mejor le fuera que se le atase al cuello una piedra de molino y se le arrojase al mar, que hacer tropezar a uno de estos pequeñitos. Mirad por vosotros mismos. Si tu hermano pecare contra ti, repréndele; y si se arrepintiere, perdónale. Y si siete veces al día pecare contra ti, y siete veces al día volviere a ti, diciendo: Me arrepiento; perdónale.
Jesús nos advierte sobre hacer que otro peque o desobedezca a Dios, nos enseña que si alguien peca debemos reprenderle, y si se arrepiente debemos perdonarlo, cuantas veces se arrepienta.

Quiero empezar contándoles algo que me llamó mucho la atención. Todos conocemos a Mahatma Gandhi, en cierta ocasión le preguntaron ¿por qué el cristianismo no progresaba en la India como había progresado en otros países? Mahatma Gandhi, hizo una pausa, miró al firmamento y con solemnidad respondió. POR LOS CRISTIANOS. Conocía a cristianos que afirmaban amar al prójimo, pero los despreciaban y lo humillaban, conocía a cristianos que afirmaban que obedecían a Dios, pero con sus hechos demostraban lo contrario. Esta situación llevó a Gandhi, a pensar que el cristianismo no es algo práctico, que es pura teoría vacía de realidad, lo cual le llevó a pensar que el cristianismo nunca se desarrollará mientras haya cristianos que desobedezcan a Dios. Vamos a estudiar tres puntos importantes que resaltan en el texto bíblico.

TODOS TENEMOS TROPIEZOS, PERO DEBEMOS TENER CUIDADO

Luego dijo Jesús a sus discípulos: —Los tropiezos son inevitables, pero ¡ay de aquel que los ocasiona!” Lc. 17:1
Definición de Tropiezo (gr.) skándalon -> escándalo -> tropiezo -> cosas que hacen pecar a la gente; la palabra original (skándalon) tiene dos significados:
En un principio quería decir el cebo o carnada que se pone en una trampa o anzuelo.
De ahí pasó a significar, en sentido figurado, la piedra de tropiezo que se pone en el camino para que la gente se caiga (PECAR). Debemos tener en mente que…

Todos somos tentados, eso es irrevocable; incluso Jesús fue  tentado:

Hebreos 4:15 NVI “Porque NO tenemos un sumo sacerdote incapaz de compadecerse de nuestras debilidades, sino uno que ha sido tentado en todo de la misma manera que nosotros, aunque sin pecado.” La diferencia entre el ser humano y Jesús es que ÉL NO PECÓ y mucho menos fue piedra de tropiezo. Ahora muchos de nosotros nos preguntamos y con mucho recelo…
¿Será nuestra conducta la piedra de tropiezo, para los demás?
En el verso (1) Jesús quería decir que es imposible construir un mundo en el que no haya tentaciones; pero, QUE LE VA A IR MAL  a aquel que enseña a otros a pecar, o les hace pecar.

Cuando aceptamos a Cristo como Salvador, automáticamente nos colocan un letrero en la frente que dice  CRISTIANO, el cual todas las personas lo ven, y por lo tanto están pendientes de lo que hacemos o dejamos de hacer, de cómo actuamos o no actuamos en diferentes circunstancias.  Muchas personas seguirán nuestro ejemplo para bien o para mal. Nuestra conducta se parece a una marca que dejamos por cada lugar donde nos encontramos.  

Recuerdo hace algún tiempo salimos con mi familia a una caminata, queríamos llegar a la cima de una pequeña montaña donde hay una cruz enorme de metal, en el trayecto había muchas señales y flechas que nos indicaban por dónde ir para alcanzar la cima de la pequeña montaña, pero con mi hermano encontramos un letrero que no estaba bien sujeto y se lo podía mover fácilmente, así que cambiamos la dirección del letrero, y ya se imaginarán lo que sucedió. No sé cuantas personas se perdieron, o fueron a donde no querían ir o por lo menos llegaron a la meta más tarde de lo normal, lo mismo pasa con nuestra conducta, con el testimonio que estamos dando. Nuestra conducta servirá de guía o será la brújula para aquellas personas que no conocen a Jesús.

Ahora nos preguntamos cuándo nuestra conducta es la piedra de tropiezo.

Somos solo oidores de la palabra: ¿Qué pasaría si un enfermo visita al médico y solo escucha las indicaciones y guarda la receta con los medicamentos, o por lo menos llega a comprar los medicamentos pero no pone en práctica las indicaciones y no toma los medicamentos? Seguramente se agravaría o llegaría a morir. Como cristianos nos pasa lo mismo sólo escuchamos pero no practicamos con el corazón lo que la Biblia nos enseña, sólo llevamos la Biblia bajo el brazo pero no la ponemos en práctica.

Agradamos a los hombres y no a Dios, cuando a pesar de ser cristianos nos involucramos con las cosas del mundo, como asesinatos, violaciones, secuestros, narcotráfico; pero muchos vamos a decir, ¡yo no hago eso!, de acuerdo entonces tal vez nos participamos en borracheras, juegos de azar, drogadicción, fornicación o adulterio, nuevamente vamos a responder ¡yo no estoy haciendo eso!, y que hay de las mentiras, de no devolver si me dan de más el vuelto, si me enojo con facilidad y no controlo mi carácter, de saltarme la fila del Banco, de dar dinero a un policía por una infracción de tránsito que cometí y muchas veces llevamos un sello que dice Jesús te ama en el carro. 

Son pequeñas cosas que parecen que no nos afectan pero que influyen mucho en el comportamiento de las personas que están a nuestro alrededor. Si vivimos de esta manera, siendo piedra de tropiezo, estamos arriesgando la salvación nuestra y de las personas que están a nuestro alrededor y esto es algo con lo que no se juega. Sin embargo, todos estamos propensos a ser piedras de tropiezo, pero en Lucas 22:46 RV1960 Jesús manifestó a sus discípulos y también nos dice a nosotros “… ¿Por qué dormís? Levantaos, y orad para que no entréis en tentación. “
Por otro lado Pablo en la carta a Santiago 1:22 RV1960  nos declara “Pero sed hacedores de la palabra, y no tan solamente oidores, engañándoos a vosotros mismos.”

Estas son instrucciones que nos evitarán entrar en tentación, es decir caer en tentación y ser tentación o piedra de tropiezo para nuestro prójimo.

Si nos mantenemos en oración permanente y aplicando la Palabra de Dios en nuestras vidas en cualquier situación o circunstancia evitaremos ser la piedra de tropiezo. Veamos ahora…EL PRECIO DE HACER TROPEZAR A OTROS: Que es el segundo punto que vamos a estudiar. En el verso (2) Jesús nos manifiesta: “(2) Más le valdría ser arrojado al mar con una piedra de molino atada al cuello, que servir de tropiezo a uno solo de estos pequeños.” Lc. 17:2

La Muerte DEL QUE HACE TROPEZAR: Atar una piedra al cuello y echarlo al mar era el modo de castigo para ciertos criminales en la antigua Grecia, esto quiere decir que si somos piedra de tropiezo para otros, nos ocasionará la MUERTE ESPIRITUAL, que es la separación de Dios, esto lo podemos ver en Mateo 13:41,42 RV1960  (41)  “Enviará el Hijo del Hombre a sus ángeles, y recogerán de SU REINO a TODOS LOS QUE SIRVEN DE TROPIEZO, y a los que hacen iniquidad, (42)  y los echarán en el horno de fuego; allí será el lloro y el crujir de dientes.” Tomemos en cuenta que este versículo dice que los ángeles recogerán del reino, es decir, de la iglesia a los que sirven de tropiezo y serán echados en el lago de fuego. Es difícil pero es real, pero sobre todo es verdad.

DEL QUE TROPIEZA: Si fuimos piedra de tropiezo y alguna persona cae en pecado la consecuencia de esa persona es la muerte. Este texto hace referencia a los pequeñitos, y esto incluye tanto a los niños como a los que están empezando su vida como cristianos, pero también a quienes quieren empezar su vida de cristianos. Además de esto ser piedra de tropiezo produce…

Desconfianza por parte de las demás personas

Incredulidad: Cuántos recuerdan la historia de  Pedro y el lobo, Pedro engañó a todo el pueblo varias veces, pero cuando en realidad estaba en peligro nadie del pueblo llegó a socorrerlo, pues ya no creían en él. Los cristianos que somos piedra de tropiezo, de una u otra manera nos engañamos a nosotros mismo y también engañamos a las demás personas, porque no somos lo que ellos esperan de un cristiano. Entonces cuando prediquemos el evangelio llevando esta misma manera de vivir, nadie nos creerá ni creerá el evangelio, de aquí es donde salen las frases como: “para qué me voy a hacer cristiano, sólo mírenle a Jaime, él dice que es cristiano pero vive igual que yo”, él dice que es cristiano pero le maltrata a su esposa, él dice que es cristiano pero no respeta a sus padres; para vivir así prefiero llevar la vida que he estado llevando hasta ahora, con ese ejemplo no quiero ser cristiano.

Y por eso muchas personas reniegan del cristianismo y están convencidos de que la vida de un cristiano y la de un no cristiano es la misma, todo como consecuencia de ciertas personas que son piedra de tropiezo Pero no quedan ahí las cosas, Jesús en el pasaje de Lucas que estamos estudiando nos enseñó que…

EL PERDÓN ES EL MEJOR EJEMPLO Éste es el tercer y último punto. Revisemos lo que dice los versículos (3) y (4) “Mirad por vosotros mismos. Si tu hermano pecare contra ti, repréndele; y si se arrepintiere, perdónale. Y si siete veces al día pecare contra ti, y siete veces al día volviere a ti, diciendo: Me arrepiento; perdónale.” Lc. 17:3-4

Mirad por vosotros mismos

Otra versión de la Biblia dice en la primera parte del versículo (3): Tengan cuidado con lo que hacen, y esto es algo que muchos descuidamos, pero seguido de esto Jesús nos muestra qué es lo que debemos hacer, la segunda parte del versículo (3) dice: Si tu hermano pecare contra ti, repréndele
Si conocemos que un hermano ha cometido un pecado, CON AMOR debemos llamarle la atención de lo que ha hecho, y exhortarle (o ayudarle) a arrepentirse para evitar las consecuencias de su acción o descuido. Si el hermano peca contra nosotros, esto… ↓Acarrea una responsabilidad para nosotros. No podemos ser indiferentes o simplemente decir, “está bien, no importa, no le voy a hacer caso, o cualquier cosa parecida.” En tal caso uno está obligado a hacer algo, porque está en riesgo la salvación (o la perdición) del hermano y su  propia salvación.

Por eso, el pecado no se debe tratar como si no existiera. El ofendido debe reprender al ofensor, no simplemente por estar ofendido y para desahogarse, sino con el propósito de producir el arrepentimiento en el hermano. Esto requiere valentía, pero sobre todo requiere el amor hacia el hermano. Si se arrepintiere, perdónale. Y si siete veces al día pecare contra ti, y siete veces al día volviere a ti, diciendo: Me arrepiento; perdónale.”

Si se arrepiente: nos indica que la reprensión (CON AMOR) fue un éxito y que tenemos, por lo tanto, la obligación de perdonarle así como Jesús perdonó a quienes lo crucificaron, esto lo comprobamos en el libro de Lucas 23:34a RV1960 “(34)  Y Jesús decía: Padre, perdónalos, porque no saben lo que hacen. Y repartieron entre sí sus vestidos, echando suertes.” Jesús intercedió por sus asesinos ante el Padre al decir perdónalos porque no saben lo que hacen lo que nos muestra que Jesús ya les perdonó.
si siete veces al día pecare contra ti: esto no significa que necesariamente sea el mismo pecado, sino que habla del pecado en general y para ello simplemente debemos perdonarlo de corazón.

EL NÚMERO SIETE: para los judíos es un número completo, esto nos enseña que el perdonar no tiene límites. Es cierto que el perdonar depende del arrepentimiento, pero el ofendido debe tener el corazón dispuesto a perdonar; es decir, si el ofensor no quiere arrepentirse, eso no justifica que el ofendido guarde rencor (diciendo o pensando, “pero ése hermano no se arrepiente, y entonces cómo le voy a perdonar”). La actitud correcta es PERDONAR.

Fuente: jonacastrot.blogspot.cl